EL RESPETO: Elemento esencial en nuestra vida

Hablar del respeto es hablar de nuestra relación con nosotros mismos, de nuestros vínculos con los otros, de cómo nos relacionamos con las normas sociales y cómo nos vinculamos con el mundo que nos rodea. Entonces, podemos ver que el respeto es un elemento esencial en nuestra vida.

¿Por qué es importante enseñar a

nuestros hijos el valor del respeto?

El respeto es esencial en nuestra vida porque nos permite valorar, auténtica y consideradamente, a los demás y a nosotros mismos y, de esta manera, propiciamos el fortalecimiento de las relaciones y generamos un mundo mejor.

Entre los principales beneficios de educar en el respeto podemos señalar que:

• Fortalece la autoestima y la confianza en nuestras propias habilidades.

• Permite contar con la capacidad para poner límites y hacer valer nuestros derechos.

• Fortalece el vínculo afectivo al interior de la familia y de otros espacios sociales.

• Contribuye a crear un clima positivo.

• Favorece la comunicación.

• Permite resolver conflictos.

• Fortalece la aceptación de las normas.

• Genera mayor comprensión, sensibilidad, empatía y tolerancia.

• Favorece una mayor conciencia ambiental que lleva a cuidar el entorno y desarrollar hábitos de vida sostenibles y saludables.

Lo que dicen las investigaciones:

"Los niños que aprenden a ser respetuosos con las normas, desarrollan mejores cualidades de autorregulación, siendo capaces de controlar su comportamiento. Tienen, además, menos probabilidad de presentar conductas de riesgo durante la adolescencia y vida adulta".

"Las interacciones sociales positivas basadas en el respeto mutuo favorecen la producción de oxitocina, la hormona “del bienestar” que reduce el stress y origina un estado de calma, confianza y empatía".

¿Cómo podemos ser un modelo

de respeto para nuestros hijos?

Podemos transmitir el respeto a nuestros hijos desde que llegan al mundo, haciéndoles sentir queridos y creando un entorno de seguridad y afecto en el que sus necesidades son adecuadamente atendidas y valoradas.

Proponemos las siguientes pautas:

1. Evita criticar o hablar mal de otras personas delante de tus hijos.

2. No insultes, grites, ni amenaces. Evita cualquier tipo de violencia física o verbal.

3. Trata con amabilidad y educación a los demás. Pide las cosas por favor y da las gracias. Saluda al entrar a un lugar y despídete al retirarte.

4. Intenta resolver los conflictos con calma, dialogando y escuchando. Si no eres capaz en ese momento, es preferible que te retires y vuelvas a hablar del tema cuando estés más calmado.

5. Pide disculpas cuando te hayas equivocado o tu conducta haya sido irrespetuosa.

6. Ofrece tu ayuda a quien lo necesite siempre que sea posible.

7. Trátate con respeto. Evita darte mensajes descalificativos. También ten hábitos de autocuidado: ten una rutina de sueño, come sano, haz ejercicio.

8. Cumple con las leyes y respeta las normas de convivencia. Respeta el semáforo, cuadra tu auto donde te es permitido, espera tu turno en la fila.

9. Cuida el entorno en el que vives. Recicla, no ensucies.

10. No abandones ni maltrates animales. Ellos también sufren. Cuídalos.

¿Cómo podemos explicar qué es el respeto

a niños menores de 6 años?

A esta edad, nuestros hijos aprenden por observación e imitación y tienden a cumplir las normas. Es importante cuidar su entorno y los mensajes que les damos.

Necesitan límites, rutinas y modelos de conducta que les ayuden a organizar su realidad.

El desarrollo de las habilidades de comunicación y la empatía son requisitos importantes para aprender a ser respetuosos.

Necesitan que les expliquen el respeto de manera sencilla y con ejemplos de la vida cotidiana.

Deben tener claro, a esta edad, que el respeto es tratar bien a los demás y nos ayuda a llevarnos bien con los otros y tener amigos. Cuando tratamos con respeto a los demás, ellos se sienten contentos.

Comportamientos respetuosos para niños de esta edad:

• Pedir las cosas por favor y dar las gracias.

• No pedir las cosas gritando, no insultar ni hacer burla.

• Pedir permiso antes de coger algo.

• Aprender a esperar.

• Recoger los juguetes y guardarlos con cuidado.

• Tratar con cuidado las pertenencias de los demás.

• Cuidar a los animales y a las plantas.

¿Cómo podemos explicar qué es el respeto

a niños de 6 a 12 años?

A esta edad nuestros hijos son capaces de entender el punto de vista de los demás y predecir su comportamiento. Disfrutan del trabajo en equipo y son capaces de cooperar, compartir y elaborar normas. Es el momento más adecuado para reflexionar sobre los valores.

Deben entender que el respeto, además de tratar bien a los demás, implica tratar igual a todos, aunque sean diferentes a nosotros en algunos aspectos: origen, religión, condición física o social. Tratar bien a los demás hace que nos llevemos mejor y seamos felices. Igual que a nosotros nos gusta que nos traten bien, a los demás también les gusta y les hace sentir bien.

Es respeto tratar con cuidado los materiales y el lugar en el que vivimos.

Comportamientos respetuosos para niños de esta edad:

• Hablar amablemente a los demás, pedir por favor las cosas y dar las gracias, saludar y despedirse.

• Decir “lo siento” o “disculpa” cuando nos equivocamos o hacemos daño.

• Hablar de los problemas sin gritar ni insultar y expresar lo que piensan con cuidado.

• Pedir permiso para coger las pertenencias de otros y aceptar que digan que no.

• Mirar a los ojos al hablar, escuchar y no interrumpir.

• Devolver a tiempo y en buen estado lo que se les ha prestado.

• Esperar su turno.

• Cumplir con las normas de la casa, del colegio y del lugar en que viven.

• Tirar la basura a la papelera.

• Tratar bien a los compañeros.

• Invitar a jugar a un compañero nuevo que no tenga amigos.

• Ayudar y ser atentos con los abuelos.

• Tratar con cuidado a los animales y la naturaleza.

¿Cómo podemos explicar qué es el respeto

a niños mayores de 12 años y adolescentes?

Nuestros hijos adolescentes ya pueden entender una explicación más elaborada, acompañada de ejemplos concretos que les ayuden a relacionarla con actitudes y comportamientos de su vida cotidiana.

Los adolescentes toman mayor conciencia de sus necesidades y derechos y el respeto adquiere un papel importante en sus vidas. Por lo general, se centran en el respeto que ellos merecen. Es importante ayudarles a que empaticen con los demás y a que comprendan que el respeto que exigen para sí mismos, también deben mostrarlo en sus relaciones con los demás.

Les podemos decir que ser respetuoso es tratar con consideración y amabilidad a todas las personas, teniendo en cuenta sus sentimientos y necesidades. Y que lo podemos hacer en todas las áreas de nuestra vida, desde que nos levantamos hasta que nos acostamos.

Comportamientos respetuosos para chicos de esta edad:

• Saludar, despedirse, agradecer, pedir por favor.

• Ser puntual.

• Arreglar su dormitorio.

• Mantenerse aseados y limpios.

• Esperar turnos.

• Resolver conflictos hablando.

• Mantener una conversación tranquila.

• Dirigirse al profesor amablemente.

• Expresar desacuerdos con cuidado.

• Tratar a los demás con consideración, sin discriminación, tolerando las diferencias.

• Tratar a los demás como les gustaría ser tratados.

• Cuidar lo que dicen en las redes sociales.

• No mirar el celular cuando hablan con una persona.

• Valorar y apreciar el esfuerzo y trabajo de los demás: la comida que preparó su madre, el trabajo que presentó un compañero.

• No revelar información privada ni difundir falsos rumores.

• Respetar el descanso de los demás y no hacer bulla de noche y madrugada.

• Ceder el asiento a una persona mayor.

• Respetar las normas sociales para convivir mejor, de manera pacífica y amable.

• Cuidar el entorno en que viven, la casa, el colegio y espacios públicos; cuidar la naturaleza, las plantas y los animales.

• Cuidar la mente: rodearnos de personas que los ayudan a ser mejores, que los tratan bien, no permitir que ser insultados o que se aprovechen de ellos.

• Cuidar su cuerpo y su salud: dormir suficientes horas, comer saludable, no consumir drogas, hacer deporte.